Así pues, como  modelo pedagógico propendemos por la aplicación del Modelo Universal del Aprendizaje (DUA) en donde, desde una mirada desde la neurociencia, la tecnología, la investigación educativa, las teorías de aprendizaje y la práctica, se busca una educación inclusiva llevada a la realidad. Es aquí en donde se tienen en cuenta tres principios, a saber: motivación (conexión afectiva), representación (reconocimiento de la conexión), acción y expresión (conexión estratégica). A través de estos tres elementos buscamos responder a tres cuestionamientos esenciales para el aprendizaje: ¿Por qué aprender? ¿Qué aprender? y ¿Cómo aprender?

Es importante resaltar que desde este modelo también se tiene en cuenta tres pautas  que están estrechamente relacionadas con los principios mencionados anteriormente. Aquí es esencial  acceder  desde el desarrollo de intereses, la percepción, y la acción física; construir en sostener esfuerzo y persistencia, en lenguaje y símbolos y en expresión y comunicación; y finalmente aprender desde la autorregulación, la comprensión y el ejecutar.

Dentro de esta propuesta pedagógica también se contempla el aula invertida en donde se hace un acompañamiento por parte del cuerpo docente, se facilita el proceso de los estudiantes de acuerdo con sus características y necesidades específicas, se atiende a la diversidad en el aula, se favorece el desarrollo  de competencias con el uso de las TIC’s  y se consolida el aprendizaje a través de la indagación y un enfoque constructivista y conceptual. Así mismo, bajo este marco, también se privilegia el trabajo colaborativo en la comunidad de aprendizaje.